Alfonso Cortés

1893 - 1969

Nació en León en 1893. Vivía en la vieja casa en que pasó su infancia Rubén Darío y en esa casa se volvió loco en 1927. Su familia lo mantenía encerrado por sus crisis de furia y a veces lo tenían encadenado a una viga del techo. Se dice que en uno de esos encierros, ya estando loco, escribió su poema «Ventana».

El primer poema que escribió loco fue «La canción del espacio».

La familia de Alfonso publicó tres libros suyos, en los cuales están mezclados los poemas antes de su locura y poemas escritos después de haberse vuelto loco. También son de calidad desigual: unos son modernistas y parnasianos, de poca originalidad, y los otros son los que nosotros llamamos alfonsinos. Estos últimos son de una poesía misteriosa y rara, paradójica y enigmática, frecuentemente metafísica, y muchas veces preocupada por problemas como el del Espacio y el Tiempo. Lo curioso es que ambas clases de poesía las escribió cuerdo y loco. Después Alfonso fue trasladado al Manicomio de Managua donde estuvo encerrado en una celda miserable por más de veinticinco años. Al final de su vida fue llevado de nuevo a León a la casa de sus hermanas y vivió allí sus últimos días, más tranquilo, aunque sin recobrar la razón.

Murió en 1969 a los setentiséis años. Desde que la poesía de Alfonso fue descubierta por los Vanguardistas de Granada (José Coronel Urtecho fue el primero en darse cuenta de ella al leer en un periódico leonés el poema «Ventana»), Alfonso Cortés ha sido considerado entre nosotros como el poeta más importante de Nicaragua después de Darío. Hay una rigurosa selección de la poesía alfonsina reunida en un libro titulado 30 poemas de Alfonso, publicado en Managua en 1952.

La familia ha publicado otros nuevos libros suyos con la producción de los últimos años, pero ésta, por lo general, carece ya de calidad literaria. Parece ser que el genio poético de Alfonso había ya decaído.

Poemas para leer:
Pasos
Ventana
Un detalle