Claudio Sánchez-Albornoz y Menduiña nació en Madrid el 7 de abril de 1893. Realizó sus estudios universitarios en Madrid licenciándose en Filosofía y Letras, con sobresaliente y premio extraordinario, en el año 1913 . Un año más tarde se doctoró, obteniendo las mismas calificaciones con su tesis sobre instituciones medievales: "La Monarquía en Asturias, León y Castilla durante los siglos VIII al XIII. La Potestad Real y los Señoríos". Publicada en 1916 por la Revista de Archivos, Bibliotecas y Museos.
A los 22 años fue número uno en las oposiciones al Cuerpo Facultativo de Archivos, Bibliotecas y Museos, y a los 25 catedrático numerario de "Historia de España" en las universidades de Barcelona, Valencia, Valladolid y Madrid.
En la Universidad Central ejerció como catedrático desde 1920 hasta 1933, fecha en que sus actividades políticas le llevan a pedir la excedencia. En su época de catedrático compaginó su actividad docente con la investigación histórica, que le llevó en 1926 a ocupar un sillón en la Academia de la Historia, y con el desempeño de cargos de relevante importancia: Decano de la Facultad de Filosofía y Letras en 1931 y Rector de la Universidad Central (nombrado por Decreto de 12 de enero de 1932, cesando por renuncia el 10 de enero de 1934).
Entre 1931 y 1936 transcurrió su vida política más activa: Diputado por Ávila en las tres legislaturas de las Cortes republicanas, Ministro de Estado en 1933, Vicepresidente de las Cortes en 1936, Consejero de Instrucción Pública y Embajador de España en Lisboa. Finalmente, en 1939, por Orden de 29 de julio, fue separado de su cátedra definitivamente a causa de sus ideas republicanas.
Tras la guerra civil salió de España comenzando así su largo exilio (más de 40 años). En Burdeos fue profesor de la Universidad desde 1937 hasta junio de 1940, fecha en que los acontecimientos europeos le obligaron a abandonar Francia e iniciar su segundo destierro en Argentina.
En Mendoza fue profesor de Historia de la Edad Media de la Universidad de Letras de Cuyo durante año y medio y en Buenos Aires catedrático de Historia Medieval hasta el final de sus días.
En su nueva cátedra bonaerense se entregó totalmente a su actividad docente e investigadora, (son los años más fructíferos). Entre sus estudios destacan los dedicados a los reinos de Asturias, Castilla y León y a la España Musulmana. Sus obras más conocidas son “España, un enigma histórico”, “Españoles ante la historia”, “La España Musulmana” y “España y Francia en la Edad Media”. Fue fundador y director del Instituto de Historia de España, cuyo órgano de publicidad "Los Cuadernos de Historia de España", fundados por él en 1944, han dado a conocer los trabajos valiosos allí realizados sobre la Historia Medieval Española. La revista tiene el mismo espíritu científico y la misma técnica que el Anuario de Historia del Derecho fundado por D. Claudio en 1924.
Al mismo tiempo desarrolló su vocación docente en las principales universidades europeas y americanas, donde era invitado para dar conferencias sobre temas históricos, dado su gran prestigio internacional.
Fue Doctor Honoris Causa por las universidades de Burdeos, Gante, Tubinga, Lima, Buenos Aires, Oviedo, Valladolid, Lisboa y miembro de las principales Academias europeas y americanas.
El reconocimiento a su intensa labor se produjo en 1970 al otorgarle la Academia de Lincei el gran premio internacional Feltrinelli.
A lo largo estos largos años de destierro continuó su actividad política como Presidente del Gobierno Republicano en el exilio (1962-1970)
En abril de 1976 regresó por primera vez a España, donde permaneció durante dos meses, para volver de nuevo a Buenos Aires.
Durante el año 1978, fue nombrado hijo adoptivo de Asturias. Fue también primer miembro de honor de la Fundación Príncipe de Asturias, Presidente de la Asociación de Amigos de Navarra, etc.
En 1980 una comisión de abulenses viajó a Buenos Aires para hacerle entrega de la Medalla de Oro de la provincia de Ávila y de la Medalla de Oro de la ciudad de Ávila. Tres años después, en 1983, recibió la gran Cruz de Carlos III.
Recibió el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades en 1984. El 28 de junio de ese mismo año, fue nombrado hijo adoptivo de la provincia de León. La Diputación Provincial acordó, con carácter de homenaje reeditar el famoso libro de D. Claudio "Estampas de la vida en León durante el siglo X".
En julio de 1983 volvió a España estableciéndose en Ávila donde viviría sus últimos días. Allí falleció el 8 de julio de 1984, siendo el Claustro de la Catedral de Ávila el lugar elegido para su reposo.
Poco antes de morir se constituyó, bajo la presidencia de S. M. El Rey Don Juan Carlos I, la Fundación cultural que lleva su nombre al servicio de la comunidad científica, educativa y de la sociedad del conocimiento. Los miembros fundadores, además del insigne historiador y de sus hijos, fueron las Excmas. Diputaciones de Ávila y de León y el Principado de Asturias. Con posterioridad, mediante sendos Protocolos Adicionales de adhesión, se integraron la Junta de Castilla y León y la Comunidad Autónoma de Madrid.
Fuente: Fundación Claudio Sánchez-Albornoz
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